
Tratamiento de Reiki
El Reiki se puede utilizar de forma complementaria al tratamiento médico. Llega mucho más allá del cuerpo físico. Resulta eficaz en multitud de molestias y trastornos tanto físicos como psicológicos como; ansiedad, estrés, insomnio, artritis, jaquecas, los problemas gástricos y también actúa como sanador de bloqueos emocionales profundos.
Reiki es un sistema de armonización natural que utiliza la Energía Vital Universal, la cual permite tratar enfermedades y desequilibrios físicos y mentales. Mikao Usui, (monje budista japonés) fue quien desarrolló el Reiki.
La práctica del Reiki se basa en un emisor, que a través de sus manos, transmite Reiki (energía vital) a un receptor que puede ser él mismo u otra persona (presente o no en el espacio-tiempo), con el fin de paliar o eliminar molestias y enfermedades. Es una energía inofensiva, sin efectos secundarios, es práctica, segura, eficiente y compatible con cualquier otro tipo de terapia.
El método Reiki se basa en la creencia hinduista de que el correcto fluir de la Energía Vital a través de los distintos chakras es lo que asegura un buen estado de salud en el organismo. Según esta creencia, el mal funcionamiento o bloqueo de la energía en uno o varios chakras sería lo que provoca o agrava el mal estado de salud, dando lugar a enfermedades y trastornos. El método consiste en dirigir la energía Reiki a los chakras de un paciente (receptor), desbloqueándolos y potenciando su proceso de recuperación.